Si estás considerando instalar aislamiento térmico removible, probablemente te has hecho dos preguntas clave:

¿Cuánto tiempo dura una colcha térmica removible? y ¿puedo aislar solo una parte del sistema para ahorrar?

La realidad es que, aunque el aislamiento parcial puede parecer una solución rápida y económica, en muchos casos termina siendo ineficiente, riesgoso y más costoso a largo plazo. En este artículo te explicamos por qué.

¿Qué es una colcha térmica removible?

Una colcha térmica removible es un sistema de aislamiento diseñado para proteger equipos industriales de altas o bajas temperaturas, con la particularidad de que puede retirarse y reinstalarse fácilmente, sin necesidad de herramientas ni destrucción del material.

En VEMORI, nuestras colchas están compuestas por tres capas principales:

1. Cara caliente (interna): fabricada con malla de acero inoxidable o tela tratada para resistir temperaturas de hasta 1260 ºC.
2. Relleno aislante: generalmente fibra cerámica o fibra de vidrio, con grosores que van desde 1” hasta 4”, según la reducción térmica requerida.
3. Cara fría (externa): diseñada para proteger el aislamiento del ambiente, hecha con tela de fibra de vidrio recubierta con silicona, teflón o aluminizados.

Además, incluyen sistemas de sujeción como velcro industrial, cintillos o argollas, que garantizan un ajuste firme y reutilizable.

¿Cuánto tiempo dura una colcha térmica removible?

En condiciones normales de operación, una colcha térmica removible bien diseñada puede durar entre 5 y 9 años.

Su durabilidad dependerá principalmente de:

• La temperatura de operación del equipo.
• La frecuencia con la que se retira para mantenimiento.
• El tipo de ambiente (interior o exterior, seco o húmedo, con químicos o no).
• La calidad de los materiales y costuras.

En VEMORI usamos únicamente textiles de alto rendimiento, seleccionados según el análisis térmico del equipo. Además, fabricamos cada colcha a la medida, lo que permite que el aislamiento funcione de manera óptima desde el primer día.

Mientras que una colcha genérica de baja calidad puede desgastarse en apenas 2 o 3 años, las colchas VEMORI bien cuidadas pueden superar los 8 años de vida útil sin comprometer su desempeño.

¿Y qué pasa si solo aíslas una parte del sistema?

Muchas veces, por cuestiones de presupuesto o por decisiones apresuradas, se opta por aislar únicamente un tramo del sistema (una válvula, un tramo de tubería, un intercambiador, etc.). Sin embargo, esto puede generar problemas técnicos y de seguridad:

1. Fugas térmicas

El calor se escapa por las zonas no aisladas, disminuyendo drásticamente la eficiencia del sistema. Esto significa que, aunque una parte esté cubierta, la pérdida de energía sigue ocurriendo.

2. Choques térmicos y desgaste desigual

Cuando algunas partes del sistema están aisladas y otras no, se generan diferencias de temperatura significativas. Esto puede provocar deformaciones, fisuras o incluso fallos en bridas, válvulas o juntas.

3. Daños a componentes cercanos

Los sensores, cableado eléctrico, pintura, sellos o sistemas electrónicos ubicados cerca de zonas no aisladas pueden deteriorarse rápidamente por el calor excesivo.

4. Riesgo para el personal

Las zonas sin proteger siguen representando un peligro latente para los operadores, especialmente cuando se trabaja cerca de válvulas, turbinas o equipos a altas temperaturas.

5. Falsa percepción de eficiencia

Muchas empresas aíslan una parte y creen estar ahorrando energía. Pero en la práctica, el aislamiento parcial no alcanza los niveles de ahorro esperados, y puede generar una falsa sensación de cumplimiento con normativas de seguridad.

Entonces, ¿conviene el aislamiento completo?

Sí. Siempre es mejor pensar en el sistema completo, incluso si se decide instalar el aislamiento por etapas.

En VEMORI, cuando recibimos un proyecto, no solo cotizamos una colcha: realizamos un estudio térmico personalizado para definir cuáles partes del sistema deben cubrirse, qué materiales son los adecuados y cómo optimizar el diseño para facilitar mantenimiento futuro.

Además, nuestras colchas:

• Están hechas a medida.
• Se instalan sin herramientas.
• Cumplen con normas de calidad y seguridad.
• Son reutilizables.
• Cuentan con garantía mínima de 12 meses (ampliable según condiciones).

¿Un ejemplo real?

En uno de nuestros proyectos más recientes, una planta energética decidió aislar únicamente las válvulas principales de su sistema de vapor. Al poco tiempo, detectaron que los tramos de tubería sin cubrir seguían irradiando calor y los sensores de temperatura estaban fallando por el exceso de exposición.

La solución fue clara: aislamiento completo, diseñado específicamente para las condiciones del sistema. Tras implementar la solución VEMORI, se logró:

• Reducir la temperatura superficial de 220 ºC a 55 ºC.
• Eliminar riesgos de contacto directo.
• Mejorar la eficiencia del sistema en un 25%.
• Proteger todos los elementos electrónicos cercanos.

Una colcha térmica removible puede durar muchos años, pero solo si se diseña correctamente y se aplica de forma integral.

Aislar solo una parte de tu sistema puede parecer una forma de ahorrar, pero en la práctica puede traducirse en más pérdidas, riesgos y mantenimientos.