Comúnmente los motores de diesel y gas cuentan con dos turbocargadores para aumentar la eficiencia del motor; uno funciona en condiciones calientes y el otro en condiciones frías y ambos usan aislamiento térmico removible, nos referimos a los turbocompresores y a los enfriadores de aire de carga.

Turbocompresores:

El propósito de un turbocompresor (comúnmente conocido como turbo) es aumentar la masa de aire que ingresa al motor para generar más potencia, esto es posible mediante el uso del flujo de gases de escape de un motor para impulsar una turbina ubicada dentro de la carcasa del turbo, es por ello que se calientan, aunado a esto, la turbina interna puede girar a velocidades superiores a 200.000 rpm, razón por la que genera aún más calor, esto es importante porque cuanto mayor sea el calor y la presión resultante del escape más rápido girará la turbina y más aire será empujado hacía los cílindros del motor por el compresor.

Sin embargo el calor tiene implicaciones para la seguridad y el rendiemiento del motor. Un turbocompresor caliente expuesto puede representar un peligro personal, además de afectar negativamente a los componentes sensibles al calor que se encuentren cerca. El aumento de calor puede aumentar la tensión en el pistón, los anillos del pistón, la camisa del cilindro y la culata del motor.

Si bien el aire que sale de la sección del compresor del turbo no está tan caliente como el escape (ya que el compresor está aspirando aire del ambiente y no aire del escape), el acto de compresión hace que la temperatura del aire aumente (por motor diesel típico, alrededor de la marca de 200 ° C / 400 ° F). Dado que el aire caliente no es tan denso como el aire frío, se puede introducir menos aire en los cilindros del motor, lo que a su vez limita la eficacia del turbocompresor. Aquí es donde entran en juego los enfriadores de aire de carga.

El trabajo del «Charge Air Cooler», también conocido como «intercooler» o «posenfriador», es tomar el aire comprimido y enfriarlo antes de que entre en el motor, este aire resultante es más denso y, por lo tanto, se puede empaquetar más aire en los cilindros del motor del que se podría haber logrado con el aire caliente que sale del turbocompresor.

¿Cómo ayuda un aislamiento térmico VEMORI?

En el caso de los turbocompresores, una manta aislante desmontable correctamente diseñada y colocada en la parte superior del «lado caliente» del turbo ayuda a mantener las temperaturas adecuadas, conservando el calor en el lado caliente y evitando afectaciones al lado frío, permitiendo el trabajo eficiente del turbo. Los componentes cercanos que podrían verse afectados por las temperaturas ambientales extremadamente altas generadas por un turbocompresor expuesto también están protegidos. Por último, aumenta la seguridad, un turbocompresor con una manta de aislamiento extraíble protegerá a las personas de quemarse accidentalmente con un componente del motor que de otro modo estaría caliente.

Para los enfriadores de aire de carga las mantas de aislamiento extraíbles se encuentran principalmente en la tubería que va del turbo al compresor, enfriador y radiador. El enfriador puede estar un poco alejado del turbo y la tubería que puede estar a más de 400° F para aplicaciones diesel (en gas sería más alto) representa un peligro para el personal si no se aísla adecuadamente. Cubrir estas tuberías con mantas de aislamiento extraíbles reduce la temperatura de superficies sensibles al tacto a niveles seguros.

Para obtener más información sobre cómo VEMORI puede ayudarlo con las necesidades de aislamiento de su motor, puede llamarnos al   +52 33 1356 8367

Escrito por: Ing Octavio Velazquez Rizo
Gerente de proyectos
octavio@vemori.com